La evolución del incendio en la isla española de Tenerife tiene este lunes mejores expectativas, aunque preocupa el frente abierto dentro del Parque Nacional del Teide, y en el sur, donde se centran los trabajos contra un fuego que ya es el mayor de España este año con 13.383 hectáreas.

En el combate contra las llamas, que tienen un perímetro de 90 kilómetros de una docena de municipios, trabajan hoy 20 medios aéreos más dos de coordinación y 610 efectivos en tierra.

El director de Emergencias del Cabildo de Gran Canaria, Federico Grillo, subrayó que, "con cierta cautela", probablemente se pueda dar por estabilizado el fuego en breve y todo va a depender de la evolución a lo largo de esta jornada que, en principio, no "es mala".

Pero el presidente regional de Canarias, Fernando Clavijo, quien admitió que previsiblemente podrán regresar a sus casas las personas evacuadas en La Esperanza (El Rosario) y las que quedaban pendientes en Arafo, invitó a no caer en el exceso de optimismo porque el incendio sigue teniendo frentes abiertos y consumiendo hectáreas.

En general, la calidad del aire ha empeorado en los municipios afectados, por lo que se recomienda a toda la población, particularmente a la que habita en la zona de Tacoronte a Los Realejos, que use mascarillas FPP2, según dijo la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila.

La evolución del incendio es favorable pero la situación es complicada en Izaña, dentro del Parque Nacional del Teide, y en los altos de Güímar, detalló Dávila, quien subrayó que lo más importante es desviar el fuego de la zona de interfaz y ha funcionado la estrategia de defensa de las viviendas.

En la parte alta de Güímar lo escarpado del terreno dificulta las labores de las brigadas por tierra, por lo que hoy se concentrarán los medios aéreos encabezados por el helicóptero Kamov y el avión Air Tractor con el objetivo de perimetrar la zona a lo largo del día y que el fuego no pase a más masa forestal en Fasnia.

Según el jefe del Servicio Forestal de Tenerife, Pedro Martínez, se trata de una zona "comprometida" por la evolución hacia Fasnia que podría tener el fuego, por lo que los medios aéreos repartirán agua y material retardante para que el avance sea "mucho más lento".

En el norte hay muy poca actividad y durante la noche se ha podido trabajar bien aunque hubo una reactivación muy "llamativa" en Santa Úrsula, de modo que ese frente no está "cien por cien liquidado".

No obstante, Federico Grillo indicó que si los trabajos son efectivos a lo largo de la jornada por la tarde se podrá "bajar" la superficie potencial del perímetro en esta zona.

La preocupación principal es la zona de Izaña, donde ayer el fuego entró "fuerte y con mucha intensidad" en El Portillo y hubo "carreras" de llamas que provocaron momentos comprometidos para las brigadas entre las once de la noche y las dos de la mañana.

En esta zona cuando arde el retamar se alcanzan llamaradas muy altas y de enorme capacidad calorífica que pueden alcanzar cinco veces el tamaño de la planta, lo que sumado a las "carreras de fuego vivo" que penetraron Izaña con mucha velocidad obligó a replegar a los bomberos y los medios de la Unidad Militar de Emergencias.

EFE.